Si te preocupa qué hacer en Andorra con niños, debes saber que el Principado se está convirtiendo, despacito y con buena letra, en un verdadero espacio kids-friendly. A juzgar por la cantidad de actividades pensados para ellos y toda la familia, viajar en familia a Andorra es una opción acertada que os dejará un buen sabor de boca.
En este artículo, repasamos algunas actividades para niños en Andorra, ya sea que viajes en invierno o en verano.
Deporte y juegos con niños
Andorra en verano con niños ofrece mucha diversión en forma de rutas de senderismos de exigencia baja para que puedan disfrutar de paseos en entorno natural. Como la Ruta del Ferro, un camino muy estimulante por el contacto con la naturaleza pero también por los hitos que salen al paso, relacionados con los modos de supervivencia de la vida en torno a la mina, en los albores de la Revolución industrial.
Esquiar con niños
Esquiar en Andorra con niños es fácil si sabes cómo. ¿Cómo? Acudiendo, por ejemplo, a aquellas estaciones de esquí, como Ordino Arcalís, que cuentan con escuela infantil para iniciar a los más pequeños en el esquí alpino. Allí encontraréis espacios protegidos, como el Jardín de nieve, para que vuestros hijos se adentren poco a poco en este deporte, con una familiarización progresiva.
Así, Andorra con niños en invierno es una época cargada de diversión. Porque además del esquí, podréis practicar otras actividades propias de la temporada, como el patinaje sobre hielo en el Palau de Gel de Canillo, por citar solo un ejemplo.
Buscar los tamarros
El bosque se convierte de pronto en un lugar encantado gracias a la presencia de los simpáticos y misteriosos tamarros. Dado que estos seres son mágicos y se desplazan con facilidad por lo más profundo de la montaña, sin una guía adecuada te resultará difícil encontrarlos.
En el plano para buscar tamarros no solo encontrarás detalles sobre su ubicación, sino también una geolocalización con las coordenadas. Aun así, te recomendamos explorar los maravillosos lugares que descubrirás a tu alrededor. Por supuesto, los tamarros se encuentran en sitios de gran belleza por toda Andorra, en lo que supone una excusa perfecta para adentrarse en la naturaleza de un modo activo y diferente.
En busca de los miradores de Andorra
Y si decidimos viajar a Andorra en verano con niños, encontraremos un territorio amable, sin los calores del interior, ni la humedad de la costa, cargado de atractivos y ofertas lúdicas. Como la ruta de los miradores, una actividad para realizar a tu ritmo, cuando más te apetezca, y disfrutar de placer de conducir hacia estos puntos de interés. Apunta estos en tu ruta de miradores por Andorra:
- Mirador del Roc del Quer. El más indicado para disfrutar de un atardecer de ensueño.
- Mirador Solar de Tristaina. Aquí nos vamos al otro extremo del día: el amanecer. Además, su plataforma permite una visión de 360º, ideal para tomar buenas fotos panorámicas y sentir toda Andorra, y parte del extranjero, bajo tus pies.
- Mirador de la Comella. A 3 km de Andorra la Vella, su área recreativa ofrece una excelente oportunidad para disfrutar de un picnic y aprender sobre la flora y fauna local a través de sus paneles informativos. Desde aquí parten diversas rutas de senderismo, y en esta ubicación se pueden admirar algunas cumbres importantes, como el Pic de Carroi (2.334 m) y el Pic de les Fonts (2.748 m).
También merecen una visita los miradores del Roc de Senders, Encamp y el del Circuit de les Fonts, que nos deja a las puertas de una ruta por el bosque de los más simpática.
En verano y en invierno y, sobre todo, con niños ¡vive Andorra!