El Principado de Andorra ofrece mucho más que esquí y tiendas. Una naturaleza espectacular que te rodea en todo momento y a la que puedes acceder de distintos modos. Ya sea a través de las distintas rutas de senderismo, como la preciosa caminata por los lagos de Tristaina, como a través de los distintos miradores, como el del Roc, que te brinda la posibilidad de admirar el Pirineo en todo su esplendor.
Pero pocas experiencias comparables a atravesar el puente tibetano de Canillo, una de las atracciones que más sorprenden a los visitantes de Andorra. Pero, un momento, ¿aún no sabes qué es un puente tibetano? Sigue leyendo y saldrás de dudas.
¿Qué son los puentes tibetanos?
Los puentes tibetanos están compuestos por una estructura sencilla de tres cuerdas dispuestas en forma de triángulo invertido: dos actúan como barandillas y una sirve como camino para los pies. Se les llama puentes tibetanos debido a su origen en el Himalaya, donde se crearon para acceder a lugares de difícil acceso.
El puente tibetano de Andorra, aunque emocionante y pintoresco, es fácil de cruzar y seguro, ya que ha modificado esa estructura original para ofrecer un dibujo sólido compuesto por una pasarela protegida a ambos lados por mallas de seguridad. Tiene un metro de ancho, lo que permite el paso en ambos sentidos, y puede soportar hasta 600 personas a la vez.
¿Cuál es el puente tibetano más largo del mundo? El Sky Bridge, con sus 721 metros de longitud, aunque para atravesarlo tendrás que viajar hasta la República Checa. En Italia, ojo, también hay unos cuantos, hasta cinco, lo que lo convierte en el país con mayor número de puentes tibetanos, en lo que supone una particular forma de hacer turismo y de imergir en la naturaleza.
Detrás de Sky Bridge, el de Andorra es el puente más largo de Europa. ¿Y el puente tibetano más alto? Lo encontrarás en Lombardía, Italia, y se llama Ponte nel Cielo (Puente en el Cielo), como no podría ser de otra manera, ya que se encuentra a nada menos que 140 metros de altura. Uno dos puntos del valle del Tartano, con el atractivo del lago Como como broche final.
Pero volvamos a Andorra.
Puente tibetano en Andorra: todo lo que necesitas saber
También conocido como puente colgante de Andorra, se trata de una infraestructura ideal para todas las familias. Es decir, no entraña riesgos, no hay peligro alguno y, si bien es impresionante, no hay espacio para el miedo, a no ser que se trate de viajeros con especial sensibilidad a las alturas, un perfil que tampoco es muy habitual en el turismo de montaña.
Algunos datos técnicos del puente tibetano de Ordino:
- Mide 603 metros por encima del terreno del valle del Río.
- En el punto de máxima elevación, llega a alcanzar los 158 metros de altura sobre el nivel del suelo. Si la torre Eiffel mide 300 de altura, hablamos, por tanto, de la mitad de su altura, lo cual no es moco de pavo.
- La anchura de la pasarela es de un metro. Es decir, es estrechito, pero suficiente para que pasen dos personas en ambas direcciones. Tranquilos, hay sitio para todos.
- El puente se sitúa a 1875 metros sobre el nivel del mar. Tranquilidad también: no necesitarás bombonas de oxígeno ni masticar hoja de coca.
- Se inauguró en 2022. Se puede decir que es una infraestructura casi a estrenar.
- El puente tiene capacidad para que circulen por él, de manera simultánea, hasta 600 personas. Pero no se trata de crear aglomeraciones, por lo que se intenta que el máximo número de personas que transiten el puente durante una hora sea de 165.
- El proyecto nació fruto de una inversión, realizada por el Comú de Canillo, de 4,6 millones de euros.
Encontrarás más datos en la web oficial del puente tibetano.
Horario y precio del puente tibetano de Andorra
El acceso al puente tibetano cuesta 13 euros si se adquiere la entrada básica, sin incluir otras atracciones. Los menores de 12 años pagan 10 euros, al igual que los poseedores de carné joven y las personas mayores de 65 años. Los niños menores de 5 años entran gratis y los residentes en Andorra también pagan 10 euros.
Si se compra la entrada en la página web oficial del puente tibetano junto con la del Mirador de Canillo, el precio combinado de ambas atracciones es de 15,50 euros para la entrada individual. Los menores de 12 años, los titulares de carné joven y los mayores de 65 años pagarían 12,50 euros. Los niños menores de 5 años pueden disfrutar de ambas atracciones de manera gratuita.
¿Cómo llegar?
Antes que nada, debes saber que, para acceder al segundo puente tibetano más largo del mundo, no cuentes con tu coche particular. Para admirar esta impresionante obra de ingeniería, es necesario tomar un autobús disponible en el pueblo de Canillo, junto al Palau de Gel.
Este servicio de autobús está incluido en el precio de la entrada y también hace paradas en el Mirador de Canillo (o Mirador del Roc del Quer). Además, para los más aventureros, existe la opción de caminar desde Canillo, recorriendo un sendero de casi 4 kilómetros que toma unos 45 minutos hasta llegar al Pont Tibetá.